Cuando Japón entró en guerra, los alemanes recibieron varias peticiones por parte de estos, para que enviaran sumergibles al Océano Indico. Estas fueron educadamente ignoradas, pues los alemanes se hallaban totalmente implicados en la lucha en el Atlántico.
Sin embargo, según cambió el signo de la guerra y los hundimientos se hacían cada vez más difíciles, así como la operatividad de los sumergibles, los alemanes parecieron darse cuenta de las atractivas posibilidades que ofrecían los mares del Extremo Oriente. Pensando que las contramedidas aliadas serían mas débiles en estas aguas, Dönitz decidió enviar una fuerza de varios sumergibles del Tipo IX; les llamaron Monsun (Monzón) uboote . |